El pasado 1 de agosto, moría a la edad de 95 años uno de los padre del fotoperiodismo, Henri Cartier-Bresson. Cofundador de la agencia MAGNUM junto con Robert Capa y David Seymour.
En 1.955 recibio el honor de ser el primer fotógrafo en exponer en el Louvre. Y como no podía ser de otra forma, fue amigo de todos los grandes de su tiempo, Picasso, Matisse, Jean Renoir, etc, a los que también inmortalizo en sus ya famosos retratos. También estuvo presente con su Leica en multitud de grandes acontecimientos del siglo XX, desde la entrada de Mao en Pekín a la muerte de Gandhi, asi como el privilegio de ser el primer fotógrafo occidental que pudo entrar en la Unión Soviética en 1954, tras la muerte de Stalin.
Pese a todo esto no consideraba un arte su trabajo, y en 1.974 abandono la fotografía para dedicarse a su verdadera pasión, la pintura.
Ha muerto el "ojo de un siglo", descanse en paz.